Este libro del autor y editor chileno Vicente Undurraga se compone de dos partes, porque para él todo puede ser y su reflejo, todo puede ser y su contrario. Contra toda lógica de equilibrio, dibuja una frontera implacable entre todos los verbos y un único contrario.
Estos verbos son teorías de la existencia, pero también maniobras para construir el ser. Es difícil hacerlo en soledad. Sin embargo, si anticipamos las maniobras, todo puede ser. Este es un libro para leer y releer, para citar, para disfrutar plenamente; para caer y recaer en él como se cae y se recae en la vida. Para amortiguar en algunos casos, para propiciar en otros. Para existir en ese lapso entre trasnochar y morir.
Un libro para abandonar cuando sea indispensable abrir la ventana. Un libro para excederse. Para dudar y reconsiderar esos verbos dentro de otros verbos, siempre con la idea de que la flecha apunte al tránsito. No necesariamente para hacerlo mejor, pero sí para hacerlo con nuestros propios verbos. Verbos seleccionados, eso sí, muy tarde en la noche.